Una vez bien limpios los calamares, rehogar las aletas y las patas muy picaditas.
Añadir la carne picada, sal de ajo y pimienta blanca y rehogar.Incorporar la miga de pan, la leche y el huevo duro picado.Mezclar bien.
Rellenar los calamares con la mezcla anterior sin apretar mucho la carne. Cerrarlos con palillos y pincharlos para que no revienten al freir. Pasar los calamares por harina, freírlos ligeramente y colocarlos en una cazuela. Sofrito de la salsa: en el aceite que sobra de freir los calamares, dorar abundante cebolla picada y añadir la salsa de tomate y un chorro de vino blanco.Triturar el sofrito y verter en la cazuela de los calamares. Añadir el caldo de pescado ala cazuela y llevar a ebullición. Probar de sal y añadir si es necesario.Mantener en el fuego hasta que se pinche el calamar y se compruebe que está tierno.
Receta de MARÍA NIEVES SOMOLINOS LÓPEZ recogida en el libro SABORES DE ATIENZA publicado por LAURA SOMOLINOS VELASCO